martes, 28 de mayo de 2013

domingo, 23 de diciembre de 2012

jueves, 20 de diciembre de 2012

ADD


Sin título, para una mejor comprensión


Se deja manipular, juro que te va a seguir. ¿Es verdad que no puedes con ella? ¿Es verdad que te duele verla? Dime que es mentira, dime que no la necesitas. Otra vez, nos engañamos. No puedes con esa complejidad (sin ofender), no puedes con esa voz que recorre cuerpos, cuéntame que no te atreves a estar entre tanta locura, que sus celos te matan, pero a la vez te atrapan, júrame que sus ojos no te hipnotizan, que su sonrisa no te hace bien. ¿Qué es lo que le falta?, sabe leer, le apasiona leer,  tiene un lente y mil formas de ver; eso sí, es amorfa, pero que hermosa es. No puedes con tanto, lo sabía. Te cuesta saber que la quieres, que la admiras. Te sientes perdido, pero es por ella. No le conozco el miedo, ella no lo tiene. Es un misterio, es de humo ¿y la alejas? No conozco su amor, debe ser intenso, debe ser de ella. ¿No podrías odiarla, verdad? Entonces, por qué no puedes amarla. Tiene dulzura en la piel,  ¿es que acaso no te gusta lo dulce que puede ser? Histérica, desesperada, ansiosa, intolerante, grosera, aferrada, egoísta, irónica, incoherente, salvaje, atrabancada, fugaz… A veces, también la odio. Y es que es tan ella, tan su amor, tan su locura, sus pasiones, es tan indefinible, tan de la mierda que es bueno no quererla. No sé como sea su amor, pero sí es como luce: vivaz, sutil, tierno, meloso, sonriente, cadente, valiente, con curvas, con bailes; sí su amor son los sinsentidos que dice, si son sus suspiros, sus abrazos, sí es poder tocarla y darle sentido a sus caricias; si su amor es poder besarla; sí su amor es malgastarla y que ella lo permita; sí su amor es verla llorar, gritar y ponerse roja de enojo;  sí su amor es como ella; Sí ese es su amor, entonces es verdad, no puedes con ella. Yo tampoco podría con ella.  (P.D. Sin ofender)

domingo, 16 de diciembre de 2012

martes, 11 de diciembre de 2012

El demonio de las diez


Cedí tantas veces, mientras más dudaba, más me acercaba. Le dije, le repetí, le grite. No quería llegar, pertenecer, no quería que me consumirán, no quería perder-me. Sonreía, quería quedarme y alimentar tu recuerdo, quería malgastarte. Quería, soñaba, pretendía. Lo hacía, me acercaba y te alejabas, te llevaba de la mano, te solté. Mira mis tiempos, que sueñan a destiempo. Se sonrojan. Sinceros, sincera, transgredía cuerpos, y al final explotaba. Regalaba todo, pues nada le costaba. Mientras giraba, daba buenos deseos. Nuestro aire, desaparece. Estático, se voltea. Fumaba donde volaba. Los forjaba, los ataba y todos teníamos que comer. Su delicia ansiosa en sus caderas, se sube, se eleva. Y a mí, me deja.  Otra, rogaba por unos brazos, unas palabras, unas más de miradas, un suspiro, que no sea mucho pedir. Que no tema pedir. Despertar, despertar y parar, algo le pasaba, la hacía insoportable y deseable. Cuando pedía la muerte, nadie se la negaba. 

viernes, 2 de noviembre de 2012

domingo, 21 de octubre de 2012

martes, 25 de septiembre de 2012

lunes, 20 de agosto de 2012

Alarma



Foto tomada por Brenda Vasquez con una Canon EOS REBEL T3